(En primer lugar, decir que pequé de optimista en la extensión de este tema, y no me lo ventilaré en 2 posts; así que la parte dedicada únicamente a Catalunya la reservo para un tercer post, que llegará mañana)

¿Qué efectos tiene políticamente todo esto? (Y ya no hablo del 0.7 económico o que la marca España en el exterior se vea reforzada y todo eso, me refiero aquí dentro).
En primer lugar, da un poco de aire al concepto de España. Aunque algunos (pocos, la verdad, muy pocos), quieran mantener el concepto carpetovetonico de esa España Imperial y Castellana, y todas esas cosas, el hecho es que ahora,
por primera vez, se ve algo así como una España que funciona, aunque sea sólo en el fútbol (pero esto, como ya hemos dicho, tiene efectos no sólo en el fútbol). La España Oficial y Periférica seguía pensando que España era esa casa vieja que Saura nos mostró en Ana y los Lobos, cuando el hecho es que se ha arreglado mucho, mucho por dentro…
Al final Zapatero va a tener razón, y España es plural…
Fijaos lo que os voy a decir; hace muchos años tuve una conversación con una persona, nacionalista él, sobre qué es España; y nos pusimos a filosofar sobre lo de la Unidad de Destino en lo Universal…y yo creo que Franco no entendía muy bien lo que suponían esas 6 palabras, o una de las interpretaciones que podía tener.
Ahí, lo que yo entiendo que se dice es que España es una Unidad de Destino, no de origen; es decir; son cosas distintas que deciden unirse para un destino común; es decir, que existien entes «pre-españoles»; una especie de «Soberanía Originaria». Es decir, no existe el Pueblo de España; existen los Pueblos de España, que deciden caminar juntos hacia el futuro o qué se yo. De hecho, el escudo de España lo representa muy bien…Ahí está todo. Otra cosa es que luego tratemos de uniformizar y tal…pero bueno, me estoy yendo por las ramas; lo que quería decir, es que la España de hoy en día es más «Las Españas» que «La España Una»; por lo menos a nivel de calle.
En segundo lugar, le da cierta autoridad al concepto en sí de España (de esta España que, a estas alturas de la película, por mucho que les pese a los extremos de los dos lados, territorialmente hablando, no tiene nada que ver con la España centralista y uniforme de tiempos – felizmente – pasados)
España lleva desde 1977 pidiendo perdon al Mundo, y pidiendose perdón a sí misma, por existir. Y claro; luchar contra una marca España, desfasada y antígua, es mucho más facil que con una pujante, plural, y que gana; y eso a ciertos nacionalismos, con toda la razón, les puede dar miedo. (En otras palabras, a cierto nacionalismo lo que le interesa es una España lo más uniforme y cerrada posible, porque pueden vender mucho más facilmente la marca AntiEspaña).
Lo mismo se aplica en el otro lado; hay gente que opina que llamar «la Roja» a la Selección es una concesión a la Izquierda, que se tiene que llamar la «Rojigualda» (o qué se yo), y que ésto de que la Selección gane fundamentalmente con jugadores del Barça es un «mecachis», o que el hecho de que Puyol saliera por la tele besando la Senyera o en las celebraciones con ella era un Ultraje a España (Tiene cojones la cosa; hemos llegado al punto también, en el otro lado, de que si un Asturiano besa una bandera de Asturias es algo bonito; si un catalán besa una Senyera, uyuyuy….)
Pero la verdad es que la España Real, los ciudadanos normales en todos los territorios (incluídas Catalunya y Euskadi), son mucho más normales, en su inmensa mayoría, y se alejan de esos extremos.
Hablando con mi amigo Ramon Arqué sobre todo esto que ha pasado estos días aquí en Catalunya (el Sábado la manifestación contra el recorte del Estatut, y el Domingo las celebraciones por el Mundial), me dio un argumento muy bueno, que me dejó pensativo; vino a decir que la primera era una manifestación política (la del Estatut) y la otra eran manifestaciones que no eran políticas pero que algunos trataban de hacerlas políticas…y me pareció un gran argumento. La gente salió a la calle para celebrar que la Roja ganó la Copa del Mundo; no para pedir más centralismo, no menos catalanismo, ni nada por el estilo. De hecho, me juego lo que querais a que hubo mucha, mucha gente en la Manifestación que está en contra de la Retallada por el TC y estaba más contenta que unas castañuelas porque España hubiera ganado.
Total, que todo es más normal; como dijo Suárez, «llevar a la categoría política de normal, lo que a nivel de calle es normal».
Y aquí es donde entran los Partidos políticos.
Ya he dicho someramente que a nivel español si le puede venir a alguien bien es al PSOE, porque eso de que España es el PP, se acabó, y bien acabado que está. Cosa que viene bien en primer lugar al PP, porque su discurso de defensa de España se clarifica y no tiene que significar por definición preconstitucionalidad, como algunos interesadamente hacen creer (lo que no implica que a veces sea el caso)
Al PSOE le viene de fábula, porque ahora pueden quitarse ese complejo de no usar la palabra «España», y parecerse un poco más a los socialistas europeos, que no tienen problemas en usar según qué terminologías (aparte de que ésto puede reactivar la moral y la economía ciudadana, y eso electoralmente da beneficios)
Al resto, (sí, UPyD incluídas) no creo que les afecte ni para un lado, ni para otro.
Mañana, todo esto en el contexto catalán.
PD: Quiero hacer un inciso para hablar de lo de Anasagasti, que venía a decir que Catalunya y Euskadi eran Naranjas en vez de roja, y yo digo que es una flamante pollez; aceptaría que dijera que una parte de Catalunya y una parte de Euskadi iban con la Naranja, pero eso de decir que Euskadi y Catalunya iban con la Naranja denota o desconocimiento o un «Senior Moment».
PD2: Otro inciso; es curiosísima la pasión que se ha despertado en Iberoamérica defendiendo a la Selección española; no sabéis la de mails que he recibido de familiares de allí tan contentos como nosotros por la victoria de la «Madre Patria»)